Uno de los hermanos de Loan acusó al abogado que integraba su defensa ante el Juzgado Federal de Goya de haberse apropiado de 12,5 millones de pesos, dinero que, según señaló, debía ser destinado a financiar peritajes sobre los teléfonos incautados en la causa.

La denuncia apunta a Juan Pablo Gallego, quien en marzo decidió apartarse de su rol como querellante. Su salida se produjo tras no atender reiterados pedidos de la familia de Loan, que le había solicitado mayor cautela en sus declaraciones públicas para no interferir con el curso de la investigación judicial.

Mariano Peña relató que Gallego les pidió 25 millones de pesos con el argumento de que ese monto era necesario para realizar un peritaje informático sobre los teléfonos pertenecientes a los siete imputados en la causa.

La familia aceptó el pedido, aunque solo entregó la mitad del monto solicitado. Según relataron, tras la desvinculación de Gallego del caso, lograron comunicarse por su cuenta con el perito que él había propuesto, quien les aseguró que nunca fue contactado para llevar adelante el análisis de los celulares.

Según trascendió, el exquerellante habría desmentido la acusación ante personas de su entorno, calificando la denuncia como una difamación realizada por alguien ajeno al entorno familiar de Loan, en complicidad con otras dos personas que habrían participado en la maniobra.

Actualmente fuera del país, Gallego tiene previsto referirse públicamente al tema una vez que regrese, y no se descarta que inicie acciones penales ante lo que considera un ataque feroz.

De acuerdo con versiones cercanas, el abogado habría interpretado la denuncia como parte de una maniobra destinada a dañar su imagen profesional.

En una entrevista, uno de los hermanos de Loan aseguró que fue Gallego quien les solicitó los 25 millones para abonar las nuevas pericias: “Personalmente retiré la plata del banco, lo pusimos en una caja y cuando papá y mamá fueron de viaje a Buenos Aires, le entregaron el dinero en una playa de estacionamiento donde se encontraron”.

La familia explicó que no saben si el abogado se llevó ese dinero en concepto de honorarios. Para demostrar esto necesitan el comprobante de la suma que le entregaron.

El joven evitó precisar la fecha exacta ni el lugar específico, pero todo indica que fue en una playa de estacionamiento donde le habría entregado el dinero. Aun así, firmó que, tras la operación, perdieron todo contacto con el abogado, ya que “nos bloqueó a todos”, según sus propias palabras.