Ocampo Fábrica caía por 2 a 0 ante su par de Juventud
Malabrigo, cuando parecía que la visita se quedaba con una ventaja casi
irremontable -con mucho empuje y amor propio- el dueño de casa la logró
acortar, en momentos que jugaba con dos hombres menos.
APERTURA
TEMPRANERA
En el amanecer del encuentro se podía avizorar una
atildada disposición de ambos elencos para hacerse del protagonismo del juego.
El local intentó iniciar una presión ofensiva adelantando la línea de volantes
de contención que contaba con un Gonzalo Alegre apostado como un 5 clásico y
con el experimentado Leonardo Peirano como auxilio permanente, especialmente
por el sector derecho.
UNO
A CERO PARA LA VISITA
A pesar de ello, desde el arranque mismo se pudo
apreciar una notable diferencia de ritmo y rodaje en favor del visitante, quien
con natural practicidad usufructuaba de mayor fluidez en el traslado de la bola
y los desbordes en ataque. Fue así como a los 9 minutos -y luego de una indecisión
en una serie de rechazos- Gaspar Sager se hizo del balón, eludió con facilidad
por la derecha la marca del lateral Castillo e impulsó un centro a media altura
que fue conectado con precisión de cabeza por Roberto Arroyo, quien de esta
manera decretó el primer gol del cotejo.
DESARROLLO
VERTIGINOSO
Luego del tanto inicial, el conjunto de Vallejos logró
compensar con ímpetu la clara diferencia que ostentaba en su favor el
adversario de turno. Su principal expectativa radicaba en las complicaciones
que acarreaban los movimientos diagonales de sus tres atacantes, en especial
por la persistencia de Fabián Base, quien con asiduidad podía imponerse ante
las espaldas de Miskevich, lateral que fue asentándose con el transcurrir de
los minutos. Ante esto, Juventud respondía con salidas rápidas que se traducían
en riesgo cuando encontraba a su rival descompensado.
SE
INCREMENTA LA DIFERENCIA
Pasado el primer tercio de partido daba la sensación
que el local si situaba cerca de la igual, aparentaba mayor solidez en el juego
colectivo y había logrado aislar a Arroyo en la soledad del ataque
malabriguense. Sin embargo, a los 33 minutos experimentó una desconcentración
inadmisible cuando toda la última línea fue testigo pasiva de un bochazo de
Molina que encontró absolutamente solo y sin marca a un Ricardo Núñez, que con
tiempo de sobra se introdujo en el área por el sector izquierdo y definió
tranquilamente cruzando el remate al palo contrario de la valla de Tomasín.
LLEGA
LA JUSTIFICACIÓN
Con la consumada ventaja de dos goles en su favor el
"Lorito" consiguió manejar con comodidad el trámite del juego en los
últimos minutos de la parte inicial, sin que el local, quien culminó el período
inicial envuelto en nervios e imprecisiones, logre inquietarlo.
SE
OBSERVÓ OTRA POSTURA EN ELCOMPLEMENTO
Ocampo Fábrica salió con bríos renovados en el segundo
tiempo intentando iniciar su obligada remontada. Sin demasiado orden, pero con
mucha concentración, logró llevárselo por delante y someterlo a un Juventud que
asumió una llamativa actitud pasiva ante los embates contrarios. Como manera de
conservación decidió recurrir a artimañas poco saludables como las de la
simulaciones de pseudo golpes y la excesiva búsqueda de que corra el reloj con
el juego detenido.
El reloj se convirtió en el principal enemigo del
conjunto fabril, la consumición de minutos lo hizo caer en un frenesí de malas
decisiones apuradas y mal ejecutadas. La impotencia que lo envolvía provocó que
en pocos minutos, y cerca del final, se quede con 9 hombres por las
justificadas expulsiones de Fabio Sosa y Enzo Villaverde.
OXÍGENO
EN LA TERAPIA INTENSIVA
El encuentro languidecía, la ventaja se tornaba
inexorable, Juventud se llevaba un colchón muy importante en su haber cuando, a
puro corazón, Federico Tourn -el mejor en Fábrica- tomó la pelota por
izquierda, se cerró y metió un centro cruzado que encontró llamativamente sola
la cabeza de Iván Godoy, imponiendo un impacto que se tradujo en el ya ansiado
descuento.
POLÉMICAS
EN EL FINAL
Las expusiones no admitieron grado de discusión, pero
hubo otras jugadas que se prestan para el debate, como el del artero codazo de
Iván Gobbi a centímetros del asistente Martínez, quien sin excusas a su favor
optó por hacerse el distraído. Pero el mayor punto oscuro del arbitraje se dio
en el final mismo, en oportunidad en que Godoy engancha por derecha y al
ingresar al área grande es derribado claramente, sin que se sancione la pena
máxima correspondiente.
SÍNTESIS DEL PARTIDO
Ocampo
Fábrica (1): Tomasín; Yeske, Villaverde, E. Aguirre, Castillo;
Peirano, Alegre, Sosa, Base; Godoy y Tourn.
DT: Adrián Vallejos.
Juventud
de Malagrigo 2: Aranda;
Miskevich, Magnago, Barbero, Fabbro; Franzoy, Mián, Sager, Molina; Arroyo y
Núñez. DT: Matías López.
Goles: 9' Arroyo (J); 32' Núñez (J); 95' Godoy (OF)
Amonestados: E.
Aguirre (OF); Godoy (OF); Magnago (J); Molina (J)
Expulsados: Sosa
(OF); Villaverde (OF)
CAMBIOS
OCAMPO FÁBRICA: Gobbi por Yeske; Verdún por Castillo; Saucedo por
Base.
CAMBIOS
JUVENTUD:Maciel por Núñez;
Amarilla por Franzoy; Zorat por Sager.
SUPLENTES
OCAMPO FÁBRICA: Carbonel, Palavecino, Fernández, I. Aguirre.
SUPLENTES
JUVENTUD: Bordón, Cian,
Massin, Sosa.
ÁRBITRO: Gustavo
Taboada (Regular)
Asistente
1: Ricardo Martínez
Asistente
2: Saturnino Bordón
(Terna de la Liga Verense)
ÁRBITRO
SUPLENTE: Pedro Meza (Liga
Ocampense)
La revanncha se jugará el domingo 4 de febrero en la
ciudad de Malabrigo.
Fuente: Ricardo Bortolozzi - Fotos: VillaOcampoSF