El mismo día en que miles de
ciudadanos en todo el país se movilizaron contra la quita de subsidios a
personas con discapacidad, decidida por un gobierno nacional que casi en
simultáneo con el clamor popular adujo errores de implementación de esta insólita
medida, los gobiernos municipal de Rosario y provincial de Santa Fe inauguraron
en un hospital público un Área integral de la mujer con nueva maternidad,
sector quirúrgico y de neonatología en aras de profundizar las prácticas de
parto respetado y maternidades seguras y centradas en la familia que viene
desarrollando desde hace años el hospital Roque Sáenz Peña, referencia nacional
en el tema.
Se trata de un contraste con
raíces profundas: el de un Estado que recorta, desconoce y hasta niega derechos
y otro que basa sus políticas públicas en garantizarlos y ampliarlos.
Si bien causó estupor el ajuste en las
pensiones no contributivas que reciben las personas con discapacidad, se trata
de una acción que es coherente con la lógica que el neoliberalismo tiene de lo
público –que desde nuestro espacio entendemos y practicamos como la presencia
del Estado para igualar a los ciudadanos- y su vocación por destruirlo y
atacarlo.
En ese sentido, no debe
sorprendernos sino hacernos reflexionar que cuando insistimos en lo perverso
del programa neoliberal hablamos claramente de acciones de gobierno que
desprotegen y descuidan a los ciudadanos y ciudadanas, incluso a quienes más
precisan de ese amparo.
Acciones que no son producto
del error de un equipo de técnicos que tienen por misión instrumentarlas sino
de una intencionalidad manifiesta y sustentada en una ideología excluyente.
Hoy más que nunca es necesario fortalecer el
espacio progresista, porque puede haber falencias a la hora de poner en
práctica ciertos planes gubernamentales pero nunca en los valores en los que
ellos se asientan: la solidaridad, la equidad, la transparencia, la
preocupación permanente por garantizar y ampliar derechos.
En esa línea se inscribe la
inauguración de la nueva maternidad del hospital Roque Sáenz Peña, en la zona
sur de Rosario. Porque una política de salud pública municipal y provincial que
es modelo no se hace de un día para el otro sino que se construye con
convicción y con capacidad de articular con todos los sectores, de cara a la
comunidad. No hablamos sólo del eje de la inversión destinada a mejorar la
calidad de vida de los rosarinos y los santafesinos, que es y ha sido mucha en
cuanto se hace una lectura del presupuesto, sino de la continuidad en la
aplicación de políticas públicas con sentido social. Y esto en el largo plazo,
sin lugar a dudas, tiene sus frutos.
Escuchamos ahora que desde
el gobierno nacional prometen dar marcha atrás con el ajuste en materia de
discapacidad; lamentablemente no nos alcanza. Necesitamos de gestiones que se
comprometan con medidas concretas de cuidado y protección hacia los sectores
más vulnerables, que tengan como norte evitar la desigualdad y en ese camino
profundizar la democracia. Necesitamos de esfuerzo y trabajo para construir un
presente con solidaridad e inclusión.
Desde el Frente Progresista
Cívico y Social sabemos lo que ese esfuerzo demanda, pero por experiencia y
obras realizadas en la ciudad de Rosario y en la provincia de Santa Fe también
conocemos que toda la sociedad se beneficia cuando el Estado está presente.
Sobre todo quienes más lo necesitan.
Antonio Bonfatti - Presidente
de la Cámara de Diputados de la Provincia de Santa Fe